Disponer de un colchón de calidad que se adapte a nuestras necesidades y gustos específicos resulta fundamental para poder disfrutar de un buen descanso y levantarnos recuperados y con energía todas las mañanas. A continuación te presentamos las claves que, según los expertos, debes tener en cuenta para elegir tu colchón.
1. La firmeza del colchón
Uno de los puntos más relevantes a la hora de elegir un colchón es sin duda la firmeza del colchón. Un buen colchón será aquel que nos permita repartir de manera eficiente el peso del cuerpo, pero al mismo tiempo debe ser bastante firme como para sostener bien nuestro cuerpo, sin llegar a resultarnos incómodo. Muchas personas creen que los colchones duros son mejores para la espalda, pero esto es un mito.
La firmeza depende de las preferencias personales y del peso de cada usuario, pero un buen colchón será aquel que respete siempre la curvatura natural de la columna vertebral alineada, tanto si duermes boca arriba como si duermes de lado, tal y como nos han explicado los expertos en colchones de www.colchonclub.es. Si es muy duro no se adaptará al cuerpo, y si es blando la curvatura de la columna se verá afectada. Lo mejor es probar diferentes tipos de colchones hasta valorar cuál es el tipo de firmeza que mejor se adapta a nuestras necesidades, tipo de cuerpo, forma de dormir y preferencias, valorando siempre las recomendaciones de los expertos y que nunca debemos escatimar en gastos a la hora de seleccionar un colchón de buena calidad que nos garantice un buen descanso.
2. La posición en la que duermes y si te mueves
También debes valorar la posición en la que duermes y si sueles moverte por las noches a la hora de elegir el colchón perfecto. Si eres una persona que duerme boca arriba o en posición supina encima de la espalda, es importante que compres colchones firmes. En cambio, si duermes de lado, los colchones con menor firmeza serán mejor para ti, porque permitirán a tus hombros hundirse un poco más para alcanzar una posición mucho más cómoda. Esto es mucho más importante de lo que crees, porque de lo contrario puedes llegar a sufrir problemas de insomnio e incluso presentar problemas para descansar bien.
Del mismo modo, si eres una persona que se mueve mucho mientras duerme, es recomendable escoger un colchón duro que te vaya a permitir girarnos sin esfuerzo, ya que en uno blando te hundirías en exceso y te costaría más girar.
3. Cuál es tu peso
Otro punto a valorar a la hora de elegir el colchón ideal es tu peso. Si pesas mucho vas a necesitar un colchón más firme y que te ofrezca una buena sujeción. Con un colchón blando te hundirás demasiado. En cambio, si pesas muy poco te recomendamos elegir un colchón bastante flexible, que se adapte a la perfección a tu contorno y te permitan repartir mejor el peso para poder dormir cómodamente.
Los colchones firmes sujetarán mejor a las personas corpulentas y de gran peso, ya que en caso contrario estarán todo el tiempo hundiéndose por la noche, lo cuál puede tornarse más grave todavía si dormimos en pareja, porque esta persona será como un agujero negro para su pareja, quien le caerá todo el rato encima por el peso y convertirá en tarea imposible el descansar por las noches para los dos. Si no es suficiente escoger un colchón firme, siempre podemos optar por colchones con sistemas independientes, ya que actualmente son muy populares en el mercado, e incluso pueden personalizarse con características diferentes, según cuáles sean las necesidades de cada persona.
4. Si pasas frío o calor
También debes tener en cuenta si eres una persona muy friolera o por contra sueles pasar calor por las noches. Si eres de las personas que siempre tiene calor por la noche y que suda con facilidad, o directamente vives en una zona muy cálida, los colchones de muelles son una mejor alternativa porque son mucho más frescos y se ventilan mejor. Por otro lado, si vives en un lugar frío o eres una persona friolera, los colchones de espuma son la mejor alternativa para ti, junto con los de viscoelástica y los de látex.
5. Escoger colchones con garantía y días de prueba
Otra de las claves a valorar a la hora de elegir colchones de calidad es que deben contar con días de prueba para poder devolverlos si no nos resultan agradables ni cómodos o nos provocan problemas de descanso. Existen muchas marcas que ya cuentan con garantías y días de prueba de hasta 100 días, lo cuál es muy importante para poder asegurarnos de que el colchón que hemos escogido nos va a permitir disfrutar de un descanso perfecto.
Asimismo, los expertos también recomiendan consultar todas las dudas que podamos tener en relación al transporte, las devoluciones o los plazos, para no llevarnos sorpresas desagradables si tenemos cualquier problema con nuestro nuevo colchón.
6. Tener en cuenta el tamaño
A la hora de elegir un colchón también es importante tener en cuenta el tamaño. En la infancia todos dormimos en colchones de 90×190, pero cuando somos adultos intentamos comprarlos lo más grande posible. En este punto, los expertos recomiendan escoger colchones de 180×200, una medida estándar y que nos permitirá descansar con gran comodidad.
Finalmente, si hablamos del largo del colchón, debemos tener en cuenta que éste nos debe permitir estar tumbados sin que nos cuelguen los pies por debajo.
7. Cuidado con las alergias
Además, es fundamental que tengas en cuenta si padeces problemas de alergias a la hora de escoger un colchón. En estos casos es recomendable elegir colchones que cuenten con algún sistema de protección contra el polvo, los ácaros, los hongos y las bacterias que te garanticen que vas a poder descansar mejor y prevenir el problema de la alergia. Los colchones con aloe vera son una alternativa cada vez más valorada para prevenir este tipo de problemas, aunque también existen modelos anti alérgicos que incluyen diferentes componentes en las espumaciones, para garantizar la máxima higiene posible.
8. La base del colchón
Finalmente, también debes tener en cuenta su base para poder escoger un buen colchón. En primer lugar encontramos somieres de láminas, que son resistentes, pueden encontrarse a buenos precios y valen para todo tipo de colchones, ventilándolos de manera eficiente.
Por otro lado encontramos las tablas tapizadas, perfectas para colchones de espuma y de muelles, aunque nada recomendables para los colchones de látex.
Finalmente, los somieres de muelles pueden usarse con colchones sencillos, y es por este motivo que se usan bastante en hoteles, permitiendo una ventilación perfecta.